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[av_heading tag=’h1′ padding=’10’ heading=’Restaurada la tumba de Jesús en Jerusalén’ color=” style=” custom_font=” size=” subheading_active=” subheading_size=’15’ custom_class=” admin_preview_bg=” av-desktop-hide=” av-medium-hide=” av-small-hide=” av-mini-hide=” av-medium-font-size-title=” av-small-font-size-title=” av-mini-font-size-title=” av-medium-font-size=” av-small-font-size=” av-mini-font-size=”][/av_heading]
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El pasado mes de Marzo 2017, miles de peregrinos y miembros del clero de todo el mundo se reunieron en el barrio cristiano de la Ciudad Vieja de Jerusalén para ver la tumba de Jesús recientemente restaurada en la Iglesia del Santo Sepulcro. La restauración se realizó previamente en la tumba, considerada como uno de los sitios cristianos más sagrados, en 1810. El costo de la renovación se cree que ha sido de $ 3.5 millones, recaudado por los representantes de tres iglesias incluyendo a Teófilo III, El Patriarca Ortodoxo Griego de Jerusalén, Francesco Patton, Custodio de Tierra Santa y Nourhan Manougian, el patriarca armenio apostólico.
La tumba recientemente restaurada y pulida, donde se dice que Jesús fue enterrado después de su crucifixión, fue develada durante una ceremonia después de que un equipo de 50 expertos de la Universidad Técnica Nacional de Atenas completase el proyecto de renovación que ha durado finalmente nueve meses y que se centró en una pequeña estructura colocada por encima de la cámara funeraria, conocida como Edículo.
El Pbro. Francisco Patton, el custodio de Tierra Santa expresó con alegría de que se hayan logrado terminar los trabajos en tiempo para la Pascua, que este año cae en el mismo día, tanto para los católicos como para los ortodoxos. Una restauración para “toda la Cristiandad” que ayuda a las iglesias a renovar su cercanía, la capacidad de colaborar y de sentirse “realmente hermanos”.
El patriarca armenio Nourhan Manougian abrió la posibilidad de permitir, una vez al año en el período que sigue a la Pascua, que las otras Iglesias puedan hacer el oficio dentro del Edículo. “Estoy seguro de que esto le gustaría a Nuestro Señor Jesucristo”. Según las reglas del “Status quo”, vigentes en la basílica, en el Edículo pueden celebrar sólo las comunidades latinas, griegas y armenias.
El patriarca Teofilo III. Declaraba “La restauración del edículo no es solamente un regalo para nuestra Tierra Santa, sino para todo el mundo. La unidad que se ha demostrado en esta restauración debe ser una inspiración para los pueblos de nuestra región, especialmente en estos tiempos en los que el mundo está experimentando dificultades insondables y confusión”.
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